A pesar de cuanto me odien los cinéfilos por ello, las escenas finales de Inteligencia Artificial siempre me parecieron una de las mejores secuencias de largometraje de ciencia ficcion que he visto. Esperar 2000 años para que un deseo simple y sencillo, como es el sentirse verdaderamente feliz por sólamente un día, es algo de lo cual uno no puede desprenderse.
Y de hecho, cuando uno vive episodios acelerados de extrema significancia, mas bien se tiende a desconfiar : Justo cuando uno ya se resignó a los desvelos, a la aprehensión, al interminable remolino de pensamientos paradójicos y a la mal disimulada ansiedad... pues a veces algo puede suceder.
Yo no quiero más que evitar eso en los próximos meses. No pido algo que me distraiga del momento fastidioso, sencillamente no quiero pasar por eso otra vez. No quiero mirar las paredes por horas.
Asi pues, a veces... solo a veces...ese deseo de olvidar, de no sentarte en el suelo con la espalda contra la pared por horas, pensando en los mil y un escenarios que pudieron haber ocurrido... se desvanecen en un segundo, con la misma velocidad con la que aprendes que aun no te han olvidado...
...y ahora tengo un poco de miedo, pero solo clavo bien mis dedos en los muslos, y trato de convencerme de que si ... merezco tener esta suerte, merezco ser feliz ... mereces tu tambien ser feliz...
y me causa una mezcla de ternura, respeto, alegria, pena, culpa de que tu tambien tengas miedo.... ya sabes como es el raciocinio...
pues hagamos una cosa... dejemos nuestra responsabilidad en casa ... vamos a caminar
lima, octubre 2006